Yo siempre he dicho que las matemáticas no “son lo mio”. De hecho, es una frase muy típica entre adultos cuando por algún motivo u otro hay que solucionar algo matemático y en ese momento no tenemos calculadora a mano. ¿Cuántas veces la habremos dicho? Acto seguido, decimos “Es que yo soy de letras”.
Sí, yo he sido de estas, de las que me he querido escabullir de los cálculos matemáticos toda la vida hasta que los papeles se cambiaron. Cuando eres tu la que estás delante de 25 personitas y sabes que de ti dependerá el amor que tendrán hacia esa materia no te puedes permitir el lujo de “machacarles” de contenidos abstractos que ni tu misma comprendes.
Empecé a querer las matemáticas enseñándolas de manera distinta a la que me las habían enseñado a mí. Cuando en el proceso de enseñanza-aprendizaje es el alumno/a el protagonista; el que investiga, el que hace, el que crea, el que toca… todo empieza a tener sentido. Y es que cuando los contenidos son explicados y analizados únicamente por el maestro/a con una única vía de aprendizaje posible y un único resultado, la motivación cae en picado. Probablemente recordamos aquellos ejercicios abstractos que nada tenían que ver con nuestra vida o problemas matemáticos que por mucho que los leyeras no tendrían sentido si los aplicásemos. Por no hablar de las horas invertidas en cosas que no utilizaremos jamás en la vida…
Pero bueno no quiero liarme con lamentaciones. Volvamos al tema. No solo empecé a querer esta materia, sino que empecé a comprenderla y eso para mí fue lo primordial. Entendía cosas que probablemente había aprendió de memoria o había mecanizado sin sentido alguno o peor todavía porque ni siquiera había llegado a hacer bien nunca y allí empezó mi motivación por querer saber más.
Durante mis 8 primeros años como docente estuve en infantil y las mates jugaban un papel fundamental en nuestra aula. Fui de la mano de fabulosos materiales matemáticos Montessori, investigando materiales en Pinterest, creando material o adaptando recursos e ideas de otros/as. A lo largo de todos estos años también nos hemos lanzado a crear materiales DIY. En este post podréis ver la máquina de sumar que ha sido top en nuestras aulas o la máquina expendedora (un poco más laborioso jejejeje) y si no sois tan “manitas” os dejamos estos otros 2 materiales descargables de juegos matemáticos para agudizar el ingenio. ¡Éxito asegurado!
También fui a diversas formaciones, entre ellas tuve el honor de conocer a Maria Antonia Canals. Estar con ella es todo un espectáculo; por la manera que tiene de expresarse y explicar todas sus anécdotas. Es conocida por el enfoque lúdico y la gran cantidad de material matemático que ha proporcionado a lo largo de toda su vida. También aprendí a comprender las matemáticas en el CAIEV de la mano de Jordi Mateo; cruzarte con él implica replantearte todo lo que estas haciendo. Con él aprendí una gran variedad de juegos súper chulos que hoy en día aplico un montón. Podéis echar un vistazo a este post que escribí explicando estos juegos que os encantaran seguro. Tanto Carlota como yo estuvimos inmersas en el mundo de las mates, ella explica un poco su experiencia en este post que también os puede resultar interesante.
Hace unos meses que conocimos Aprendiendo matemáticas; una escuela que ofrece cursos y formación online para enseñar matemáticas con materiales manipulativos y juegos a niños y niñas de todas las edades. Lo que más nos ha gustado a nosotras es precisamente esto, que hay cursos para todas las edades, especialmente secundaria que parece ser la etapa más olvidada… ¿Ya no tienen derecho a aprender jugando cuando son mayores? Os animamos a que cotilleéis un poquito la web de Malena que es la que imparte los cursos. Si queréis aprender cómo enseñar matemáticas para que los niños /as las entiendan y estén motivados/as, Malena os lo contará en esta clase online gratuita y así puedes decidir si te convence».
¡Nosotras ya estamos en ello! Os iremos diciendo qué tal ?
Y vosotr@s, ¿Cómo lleváis las matemáticas? Nos encantará que nos expliquéis vuestras experiencias. Un fuerte abrazo y ¡Feliz semana!
Poneros en contacto con lara Giménez Q flipareis!!!!
okkkk!!! ahora investigamos 😉